Hola amici y compañeros de universidad. Hoy dedicaré el blog a hablaros de mis impresiones tras asistir a la asamblea de alumnos-rectorado por lo del Plan de Bolonia. La asistencia de alumnos ha sido masiva, muchísima gente se ha quedado fuera del aula magna de Filosofía, sentada en el suelo, de pie, o siguiéndola por internet. La gente se ha movilizado mucho, los estudiantes estamos realmente cabreados. En mi Italia también se está liando una gorda, incluso con barricadas en universidades y todo. La verdad es que ya llevamos varios años movilizados.
Lo que pretende este plan es sangrarnos aún más, no olvidemos que quien lo propuso fue la OMC, así que no me venga el señor rector (como hacen también en Italia) vendiéndome la moto diciéndonos cosas como:
- Las empresas no influirán en nada;
- El proceso supone una Universidad Pública de coste cero;
- La búsqueda de pragmatismo, fomento de la competitividad;
- Becas préstamo;
-...
Creo que el rector piensa que somos gilipollas, porque esta es la sensación con la que nos fuimos después de 3 horas y pico de debate. Ni mucho menos expresó de manera clara su posicionamiento, se dedicó a capear los argumentos que se le ofrecían, a no ofrecernos los suyos, a demostrar la falta de información y coordinación de los diferentes decanos... Una risa, la verdad, aunque el futuro educativo que nos aguarda es para ponerse a llorar.
Uno de los representantes estudiantiles, el que vino por parte de Naranjos, hizo un discurso brillante. Tomo presatada la metáfora que usó al inicio del mismo:
"Se nos dice que hay que subirse al tren de Europa. Pero: ¿a dónde nos lleva ese tren?¿quién lo dirige?¿sobre qué vías circula?¿cuánto vale el billete?
Señor rector, no somos clientes, no queremos convertirnos en meros productos de usar y tirar sometidos a las directrices del mercado. Escúchenos, que se haga un referéndum, que se pare el proceso, que se hable, represéntenos. Si no va a hacerlo:
¡¡¡¡¡DIMITA YA!!!!!
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