Escuchar y pies de plomo

Hola amici,

Al final la confesión con Steffano me falló. Habíamos quedado sobre las 19.30 para tomar unas cervezas y hablar, pero me llamó diciendo que no se encontraba muy bien. Tenía fiebre, me dijo. Llamé a Marco para ver qué hacían y si iban a hacer la segunda parte de Halloween. Pero no, la gente estaba muy cansada. Jueves, viernes... sábado ya sería demasiado. La verdad es que mi cuerpo también me pedía un descanso, así que se lo concedí.

Cené en mi piso y luego bajé con Nerea a tomar una cerveza al Natura, el pub de debajo de casa que más frecuentamos. Hicieron una jam session. Estuvo muy bien, cada vez me gusta más este tipo de actuaciones. Fuimos los dos solos porque Carlos estaba en Mestalla viendo al Valencia y María estaba en su pueblo.

Sobre el viernes, informaros que me cundió mucho. Estuve casi toda la noche hablando con Noelia. Notaba que necesitaba hablar con alguien, que algo le pasaba. Finalmente me contó que la llamada del jueves había sido de su novio, que últimamente no estaban muy bien y que poca salida le veía a la relación. He de confesar que, pese a lo mal que la veía, una parte de mi se alegró. No tengo que engañarme, si lo dejaban tendría más posibilidades. Pero no insinué nada de eso. Me limité a escuchar. Poco a poco dejamos atrás los temas de su relación y el Enzo gracioso apareció en escena. No sé si se reía de mis pintas o porque realmente le hacía gracia las tonterías que hacía. Qué más da, con verla sonreír me bastaba. Cuando nos despedíamos todos, se acercó y me dijo:

-¿Tienes tu móvil a mano?

- Sí, ¿por?

- ¿Me lo dejas? Necesito hacer una llamada. Me he dejado el mío en casa.

- Claro, claro.

- Gracias.

Se separó unos metros del grupo e hizo la llamada, aunque nadie contestó porque me lo devolvió enseguida. La sorpresa vino después. Ya metido en mi cama, sonó mi móvil. Un sms. No tenía el número. El sms decía (lo pongo sin las abreviaturas):

"Buenas noches Enzo, gracias por hacerme reír y sobre todo por saber escuchar. Lo he pasado muy bien. Noelia"

Toma ya. Me había pedido el móvil para hacerse una perdida al suyo. Bfff... os podréis imaginar lo agusto que dormí el viernes. Le contesté que yo también me lo había pasado muy bien y que no tenía porqué darme las gracias. Ayer estaba con unas ganas enormes de contárselo a Steffano, pero como os he dicho al inicio, se encontraba enfermo. Así que se lo conté más tarde a Nerea. Me aconsejó que tenga cuidado, que Noelia aún tiene novio y que debo esperar a que ellos se aclaren. Tiene razón, por lo que voy a ir poco a poco y no montarme las películas que me estoy montando. Yo tampoco quiero pasarlo mal.

Así que anoche a la 1.00h ya estaba "en el zobre", como dice Carlos. Por cierto, el cabrón me ha depertado a gritos sobre las 8.00h de la mañana. Venía de fiesta aún y llevaba una encima que no se tenía en pie. Se ha puesto a saltar en mi cama y a cantar una especie de chirigota. Pero vamos, entre su acento, lo borracha que iba su dicción y mi estado de semi-conciencia de cuando me acaban de despertar, no entendí ni papa.

Mira que me he reído. Al final lo he tenido que echar, peligraba la integridad de mi habitación. Esta tarde seguramente vaya al cine. Me interesa ver la nueva de Javier Fesser, Camino. Ya os contaré que tal. Iré con Nerea y con Carlos, aunque no sé si el de "Kaí" estará en condiciones.

"Au xiquets i xiquetes"