Una nueva compañera en Valencia...

Hoy me he despertado con la peli de ayer todavía en la cabeza... No se me borra la imagen de esa niña sufriendo por una causa que ni ella entiende, ni falta que hace. Es injustificable tanto devotismo innecesario.

En fin, que por eso mismo hoy me he propuesto afrontar el día de otra manera que como lo acabé ayer. Hoy ha sido un día para mí, para pensar, para reflexionar. Y qué mejor que una bici para que te lleve sin saber como a sitios a los que nunca irías si fueras caminando. De manera que, con la mochila al hombro, unas gafas de sol y mi gabardina de siempre, he ido a la Plaza Marqués De Busianos a hacerme con una bicicleta. Debía de ser sencilla pero,eso sí, con un punto que me atrajera. Yo siempre digo que si algo no te gusta, no lo disfrutas. Y hoy quería disfrutar de todo AL MÁXIMO.

Y esta es la preciosidad de la que te hablaba, caro diario.

Le he podido hacer una foto porque al final de la tarde me he encontrado con Marco! Es una BH, me la he alquilado para todo el mes, y la pienso disfrutar todos los días. Me he propuesto a mi mismo desplazarme con ella y hacer un poco de ejercicio...Tantas reflexiones en la pensión, y tantas conversaciones aquí en Valencia me han hecho ganar unos kilos!Y eso a Noelia no le debe entusiasmar.

Por cierto no sé nada de ella, desde el viernes que está desaparecida. Me muero por hablar con ella y preguntarle cómo está.

Obviamente, esta mañana he pensado bastante en ella, no se me quitaba de la cabeza. La verdad es que le he dado un repaso bastante completo a mi vida hoy. Por mi cabeza han pasado mi padre, Nicola, mi ex novia, mi pueblo...Explicar todo ahora sería demasiado pesado, te cansaría enseguida, mi querido diario. Ya iré recuperando algún pensamiento.

La verdad es que necesitaba recapacitar sobre todo lo que ha sido mi vida. Me ha venido bien pensar en cómo echaba de menos mi pueblo, Viareggio, la gente de allí, mi tía Julia, Tonino, mi amigo Nicola... Como mi padre ha sido el gran causante de mi marcha de allí. De una búsqueda de aire fresco. Él es quien me reprime, quién me obliga a ser como no quiero. Si piensa que algún día llegaré a ser como él, lo lleva claro...Con sus galones, su formalidad y su actitud agria de siempre...

No me gusta hablar de él. Simplemente no me gusta como es, su carácter. Aunque siempre he pensado que algo bueno ha de tener, si alguna vez lo quise...

En fin, no me alargo más, ya está bien por hoy. Mañana os cuento mi día completo. Espero tener tiempo para perderme con mi bicicleta.

Ciao!